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Iniciar un negocio en Internet conlleva una serie de trabajos previos y de preparación que no siempre realizan aquellas personas que pretenden adentrarse en el mundo online.
Uno de estos pasos clave es definir cuál va a ser nuestro retorno de la inversión (ROI), así como el tener claro cómo vamos a medirlo y cómo vamos a lograr dar un paso más allá para lograr que ese retorno supere a la propia inversión y de esta manera conseguir beneficios.
Por ello, vamos a fijar una serie de valores que hemos de tener en cuenta cuando comencemos nuestra andadura digital.
Elementos clave en Internet
Nombre de dominio
Será nuestro identificativo en la red, y con él hemos de darlos a conocer. Aquí hemos de ver si vamos a promocionar nuestro nombre de marca, nuestro producto, nuestro nombre personal o nuestra empresa. Obviamente todo ello puede mezclarse y algunas veces es interesante promocionar el servicio que se ofrece.
Veamos varios ejemplos:
- Nombre de empresa:
ILAB. Es una empresa que organiza cursos de inglés en Barcelona. Añade la palabra edu en el nombre tradicionalmente vinculada a la educación superior.
https://www.ilab-edu.es
- Nombre de persona:
Antonio Rey Gil es un dentista de Valladolid. Es muy común que los profesionales liberales quieran unir el prestigio y la fuerza en internet a su nombre, el conocido branding personal.
https://antonioreygil.es
- Nombre de producto:
Multiplay es una empresa que comercializa parques infantiles y parques de bolas. En ese sentido la URL que ha elegido para la promoción de este tipo de productos es clara.
https://www.ventadetusparquesinfantiles.net
Como vemos las opciones son varias, y en cualquiera de los casos, desde dentistas a parques infantiles pasando por estudiar idiomas o vender servicios de consultoría, hay que hacer una reflexión previa y tomar decisiones basándonos en los objetivos que queremos conseguir en Internet.
Ojo, que a partir del dominio hemos de desarrollar una web en condiciones y adaptada al tipo de público al que queremos llegar. No es lo mismo la web de un dentista orientada a un paciente que la web de un dentista enfocada a un público formado por otros profesionales.
Promoción a través del posicionamiento en buscadores
El tráfico de visitantes proveniente de los buscadores como Google es uno de los principales puntos a la hora de conseguir ventas. A mayor número de visitantes que tengan un alto nivel de conversión, es decir, que puedan convertirse en clientes, mayor probabilidad de cerrar una venta.
Por ejemplo, si tenemos una parafarmacia y queremos posicionar por depilacion laser León, es posible que lo queramos hacer también por depilación Leóny laser León. Aquí habrá que comprobar cuántas visitas recibe depilación, laser y depilación laser y a partir de ahí escoger una, dos o las tres.
Escoger León no genera más visitas, pero sí hace que sean más tendentes a realizar conversiones, ya que alguien de Valladolid es difícil que vaya a comprar a Almería, por lo que aunque esté interesado en el servicio que se ofrece la localización será un impedimento. Ganaríamos visitas, pero no conversiones, y si el objetivo es la conversión el aporte sería mínimo.
Es por ello que una agencia de SEO puede ser realmente útil para que consigamos vender, y contratar los servicios de alguien que logre que estemos arriba del todo en Google para las palabras que nos interesa suele ser una buena decisión. Eso sí, hay que tener en cuenta varios criterios: profesionalidad, propuesta, bagaje anterior y equipo que lo desarrolla.
El mundo del posicionamiento web está lleno de personas sin capacitación que pasando los meses, no consiguen resultados. Es por ello que contactar con la agencia adecuada es un punto esencial.
Las redes sociales son una gran oportunidad para lograr los mejores resultados online. Facebook, Twitter o Google+ se han convertido en verdaderos motores que permiten el contacto entre empresarios y consumidores, entre profesionales y usuarios, entre quien oferta y quien demanda.
Es por ello que plantearse qué hacer en redes sociales y cómo obtener beneficios de ello ha de figurar en cualquier plan de marketing online que se precie.
Por ello, a la hora de planificar un plan de redes sociales, hemos de fijar como objetivos qué queremos conseguir y, a partir de ahí, plantearnos cuáles serán las redes sociales que vamos a escoger y cómo vamos a medir el cumplimiento o no de los objetivos que nos hayamos planteado.